ROBOT ARMY, la militarización del conflicto en la industria
En esta nota retomaremos el tema de la nota anterior con el mismo título, desde la perspectiva de la militarización en los procesos represivos en Latinoamérica. Para ello haremos un poco de historia que nos dará una referencia para poder analizar en este nuestro tiempo la tan doliente expresión: Robot Army (Armada/ejército de robots), la cual intenta bajar un marco productivo en el contexto social de la logística y la industria en general. Aquí comparto algunas citas relacionadas con la historia de la automación electrónica en la industria.
Industria 3.0
Años 70: automatización y robótica
La tercera Revolución Industrial tuvo lugar en los años 70 y podría denominarse también «Revolución electrónica». La robótica y la informática dieron lugar a una automatización masiva de la producción.
“En los años 70 y 80, la tecnología informática se hizo más avanzada y se incorporó a los procesos industriales. Con esto vino un aumento en la eficiencia y la productividad, así como una disminución en los costos de producción.
El uso de robots para la automatización también comenzó durante este período de tiempo. Inicialmente utilizados para tareas repetitivas, como soldar o pintar, los robots se han vuelto lo suficientemente sofisticados para manejar operaciones complejas como el trabajo en línea de montaje.” Phillip Dodd, líder de Tecnología Infraestructura de Ingeniería de IIoT
En la década de los 70, se militarizó el conflicto regional latinoamericano en el contexto mundial de la guerra fría. Dicha militarización fue ejercida por fuerzas locales del continente a través de las prácticas represivas provenientes de las políticas intervencionistas de EEUU y Francia, junto a los sectores económicos del liberalismo y en nombre de la defensa de un progreso económico sectario. Como defensores de una verdad única del credo del Dios Mercado y sus dogmas deshumanizantes, ejecutaron un plan sistemático de persecución, tortura y desaparición de personas en el todo el territorio latinoamericano. Se militarizó, el conflicto social, y el Estado conservador implantó a través de su terrorismo un orden que agudizó las medidas económicas y sociales contra todas las minorías y quienes defendían sus derechos. Nos referimos como minorías a los sin poder en su amplio espectro, incluyendo a grupos marginales hasta el pequeño comerciante que compartía el pan con su barrio o las organizaciones productivas responsables que incluían en su prosperidad a su entorno local. Afectando a todos aquellos que se consideran solidarios con el desfavorecido. Solidaridad responsable, vivida y sentida con y desde los sectores marginados, los invisibilizados y a quienes se le niega el sustento para poder llevar una vida sana con las necesidades básicas que ello implica y son su derecho. Debemos notar que las denegaciones de las necesidades básicas no solo agudizan un problema individual sino que también colectivo, generando una falta de cuidados y vida saludable para las generaciones futuras.
“En este sentido, ya podemos decir que la denominada optimización del diseño puede ser a menudo una pura falacia ideológica, porque un diseño óptimo para cierto sector social o desde cierto punto de vista relativo a un orden de prioridades que puede ser muy objetivo, puede no ser óptimo para otro sector o punto de enfoque de la cuestión.” Jordi Llovet
Las tecnologías deben desarrollarse y aplicarse teniendo en cuenta y conviviendo con el desfavorecido, el que no tiene opción y por ende tiene dolor de panza vacía. Caso contrario esta tecnología será óptima para unos pocos, para los favorecidos, los emprendedores individualistas que no ven al prójimo como a un otro con sus necesidades, su cultura y sus capacidades como ser humano libre, íntegro y autogestor de su historia.
En este punto es interesante traer este concepto para argumentar el análisis:
“Leal Buitrago (2003) concluye en esa misma línea que la DSN en América Latina “fue, ante todo, un planteamiento ideológico y político que responde a una racionalidad mecánica y ante todo militar, que fue ejecutada por medio de golpes de Estado” (p. 85).”
“Estas lecturas extreman los planteos que focalizan en la “dependencia militar” latinoamericana. La dependencia adquiere rasgos mecanicistas. Se explica, en parte, por su concepción de la guerra fría, según la cual la región se constituye en un escenario de batalla subordinado a los mandatos e intereses de las potencias en pugna, y los actores en correas de transmisión de las mismas. La guerra fría absolutiza las dependencias, imposibilita toda resistencia a las prácticas imperialistas y subsume a los países latinoamericanos, sin opción, en el conflicto este-oeste. Desde esta mirada, los “nuevos militarismos” y la DSN son vistos como una ruptura histórica.”
Laura Sala, «Las ideas externas en las doctrinas militares latinoamericanas de la guerra fría», Universidad Nacional de José C. Paz, Argentina
Es notable apuntar la existencia de un mecanicismo, como caracterización de un actuar. El hacer es mecanicista y se controla o comanda desde los centros de poder. Apuntamos esta reflexión como (a).
“Mientras la corriente francesa hacía hincapié en un enfoque ideológico y global del fenómeno de la insurgencia, la influencia de Estados Unidos se ejercía como justificación racional de la intervención militar en la seguridad y el desarrollo internos y subrayaba la necesidad de una defensa colectiva del hemisferio occidental contra el expansionismo comunista (Armony, 1999, p. 35).” Laura Sala, «Las ideas externas en las doctrinas militares latinoamericanas de la guerra fría», Universidad Nacional de José C. Paz, Argentina
¿Qué podemos extraer de esta ideología? La intervención militar para eliminar aquello que impide determinado progreso en valores de capitalización de fe al Dios Mercado. Apuntamos este concepto como (b)
“La segunda perspectiva enfatiza en el proceso de exportación-importación de ideas para pensar la doctrina. Esta mirada no considera a las ideas de origen externo como “impuestas” a las Fuerzas Armadas locales.
Mauricio Ruz (1977) ironizó, tempranamente, sobre ello: “Todo pasaría como si de repente una determinada concepción surgiera en otro contexto e, imponiéndose desde fuera, tuviera la capacidad de regular la sociedad y dictar las acciones de sus sostenedores o promotores” (p. 424).” Laura Sala, «Las ideas externas en las doctrinas militares latinoamericanas de la guerra fría»; Sección: “El proceso de importación-exportación”, Universidad Nacional de José C. Paz, Argentina
Apuntamos este concepto como (c), fundamental para no olvidar el poder del centro y el alineamiento de sus socios locales. Por supuesto dentro del contexto que estamos analizando de la ideología de la militarización. Para quienes nos gusta leer la historia o cuasi historia ensamblada de diferentes escritos y relatos de la biblia, en la complejidad de su composición, nos permite realizar la siguiente hermenéutica simplificada. Jesús, luego de recorrer la periferia de su pueblo, caminar con los que habían adquirido deudas que los dejaban sin tierras debido a los impuestos del imperio dominador, las prostitutas, los marginados de su ciudad incluyendo aquellos y aquellas que eran tomados y tomadas culturalmente a menos por no ser considerados puros, y marginales; él se dirige hacia el centro de poder local. El templo con sus verdades y lugares vedados al pueblo, el sacerdocio local y la clase alta complotada con el Imperio Romano, lo consideran un revoltoso o un representante de la voz de aquellos con quienes había predicado un mundo justo y lo ejecutan. Tal es así que no queda un cuerpo, es un desaparecido, que luego en la esperanza de quienes lo amaban se les aparece en integridad, en carnalidad. Ellos vivencian su recuerdo según la experiencia judía como pueblo oprimido y de la lucha contra los poderes imperiales [3] [4] [5]. Es necesario desvestir el relato de lo milagroso, y comprenderlo desde una concepción humana completa, no sólo desde una perspectiva espiritual, sino también material. Espíritu, razón, psicología, esperanza, necesidades básicas, sufrimientos corporales, la alimentación comunitaria, todo ligado en un mismo vivir. La esperanza futura es completa, no manda a rezar u orar para acallar el hambre o las laceraciones de todo tipo, sino que busca: esperanza, lucha, amor, compartir, alimentación y salud.
¡El dios Mercado, lleva lujuria el lunes! [7]
«15.000 robots marcan el inicio del Cyber Monday de Amazon» Elizabeth Weiss, EE.UU. HOY EN DÍA
Para estos intereses, los robots forman una armada. Una armada que niega el sustento a aquellas personas que requieren de un trabajo digno. No sólo de su trabajo, sino de estar insertos en su capacidad de hacer historia, transformar la realidad con sus manos y corazones. Tener voz, ser parte. El empresario, como un general, adquiere la armada de robots, como mercenarios. No es una guerra fría, es una guerra caliente que quema toda posibilidad de florecer una vida íntegra. Quizás los comandantes, los empresarios ambiciosos, permiten ponderar algunos trabajos, dóciles, manejables y flexibles que no ofrezcan resistencia a dicha armada.
“La ética militar se apoya para empezar en una contradicción: «La profesión militar es la única cuya función fundamental es inmoral. La ética militar es una paradoja, que trata de establecer una relación entre los dos conceptos antitéticos de la moralidad y del asesinato.” White, Richard D. Jr.; Military Ethics, en Cooper, Terry L.; «Handbook of Administrative Ethics»; CRC Press, 2001, p. 629-648
Como he desarrollado en otros escritos, los seres humanos oprimidos, en determinado momento se organizan tratando de no replicar la dominación. Para mantener el rumbo se requiere de educación liberadora, creatividad, y una visión utópica que permita realizar una crítica interna y global. La cual es una de las maneras de desestabilizar estos procesos, generar conflictos desde el exterior, abusar de la superioridad, forzando a lo que se está gestando a requerir a una respuesta rígida, centralista, militarista, que logre la subsistencia de dicho proceso y que se subordine al o a los centros de dominación. Parece lógico, pero es el principio para que el explotado explote a su prójimo, que no se vean como hermanos entre ellos. Estos procesos se pueden interpretar fácilmente por ejemplo en uno de los mayores conjuntos de libros compendiados, la biblia. La militarización comienza con la centralización, en respuesta al asecho de los imperios del exterior. Fuerzan a militarizar, a replicar el modelo opresor. Las ROBOT ARMY las mandan a liberarnos del trabajo, del trabajo de ver al hermano como tal, a sentir nuestros dolores, a compartir una cultura en común y una visión utópica liberadora, que critique el orden opresor de los ejércitos tan bien formados, tan subordinados, tan obedientes (¿será una ironía?).
“La profesión militar es la única cuya función fundamental es inmoral. La ética militar es una paradoja, que trata de establecer una relación entre los dos conceptos antitéticos de la moralidad y del asesinato.»1 White, Richard D. Jr.; Military Ethics, en Cooper, Terry L.; «Handbook of Administrative Ethics»; CRC Press, 2001, p. 629-648
Si analizamos las conclusiones de a, b y c, podemos considerar que se trata de un proceso centrista, altamente jerarquizado, y mecanicista el que se trató de imponer. Estas cualidades, conllevan a una analogía con la tradición de diseño de los sistemas de control y la sustitución de toda humanidad. La Armada de Robots no es más que la sistematización e idealización de una concepción extrema de la eficiencia de la producción para la maximización de las ganancias. La finalidad de la armada, es poner fin a toda resistencia humana en los procesos productivos. No basada en las armas de fuego, sino en el arma del poder, como dije antes, de: hambrear, de dejar sin opción, de desvalorizar el trabajo profesional y la capacidad del ser humano de crear. La capacidad de hacer las cosas con amor.
Podemos decir que se trata de la perfección del fundamentalismo de la violencia y la opresión silenciosa.
“Sin embargo, después del avance del neoliberalismo en los territorios latinoamericanos, se produjo un crecimiento de la derecha en las esferas políticas y sociales del continente. Ese proceso se reflejó no sólo en la retirada de derechos a la clase trabajadora en América Latina, sino también en los discursos para debilitar las instituciones democráticas. El fundamentalismo religioso es uno de los instrumentos para el mantenimiento de este proyecto neoliberal, que tiene como objetivo la fijación de una verdad única, inmutable e incuestionable; o sea, se trata de algo antidialógico y antiplural, con una fuerte idealización de un pasado inexistente. Esa verdad absoluta y dogmática va mucho más allá de la religión: construye modelos de vida política, económica y social.” Fundamentalismo e imperialismo en América Latina: acciones y resistencias.
El fundamentalismo de mercado, nos quiere imponer su única verdad, la del descarte de lo que ya no tiene valor para él: el trabajador humano. Porque exige sacrificios humanos, mandando sus armadas de robots para conquistar al otro por medio del consumo y deshumanizar hasta llevar al desprecio de la vida humana de otros.
Se justifica la muerte en un conflicto. Así como en los tiempos represivos, de desaparición y exterminio se creó un enemigo interno, como en aquel tiempo y este, se estigmatiza al trabajador, sobre todo al tercermundista, como perezoso, por ser meramente humano y necesitar descanso, posibilidad de amar, de transformar, de humanizar, de actuar ante las injusticias y la explotación, de embarazarse, de tener vacaciones, de tener tiempo para orar por otro mundo posible. Sobre todo para predicarlo. El empresario, mecanizó el conflicto, trajo y creó el trabajo mecanizado con capacidad de procesar por medio de ordenadores electrónicos de procesamiento. Trajo a sus “rompehuelgas”.
Fuentes:
[1] Sala, L. (Año). Las ideas externas en las doctrinas militares latinoamericanas de la guerra fría. Universidad Nacional de José C. Paz, Argentina.
[2] Llovet, J. Diseño e ideología: El reto de la identidad.
[3] Crossan, J. D. (1998). The birth of Christianity: Discovering what happened in the years immediately after the execution of Jesus. San Francisco, CA: HarperSanFrancisco.
[4] Dri, R. (2008). La utopía de Jesús: El reino de Dios y su justicia. Buenos Aires, Argentina: Editorial La Aurora.
[6] 2 Macabeos, Nueva Versión Internacional.
[5] Dodd, P. (2024). Descripción completa de la automatización industrial. Infraestructura de ingeniería de IIoT.
[7] Cyber Monday —- la expresión y concepto mercantilista del «Cyber Monday» fue ideado por el estadounidense Ellen Davis, vicepresidente senior de la Federación Nacional de Minoristas (National Retail Federation, NRF), y Scott Silverman, en un comunicado de prensa del sitio web de Shop.org, una división de la NRF, en 2005. La idea era capitalizar el creciente hábito de los consumidores de realizar compras en línea el lunes siguiente al Día de Acción de Gracias, aprovechando las ofertas que muchos minoristas ofrecían en sus tiendas online. Luego se popularizó en otros países comoAlemania, Canadá, Reino Unido y otros países.
[8] Tricontinental: Institute for Social Research. (2023). Fundamentalismo e imperialismo en América Latina: Acciones y resistencias. Recuperado de thetricontinental.org
[9] G. Reimondo, “El Dios Mercado y El Señor Tecnología”, Revista TECNOLOGIA HUMANIZADA núm. 5 del 2019
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