Hace unos años escribí algunas notas sobre los llamados movimientos luditas. Movimientos horizontales que se produjeron ante la aparición de las máquinas automatizadas en la industria textil y agropecuaria. Cuando comencé a leer sobre la historia del movimiento de los trabajadores textiles, sus himnos, su operatoria y su búsqueda de una vida digna, identifiqué que claramente se trataba de una teología de la liberación. La mayoría de quienes conformaron los movimientos luditas (1811-1816) eran metodistas.. Poseían una organización no centralizada. Participaban los productores pequeños, los trabajadores y sus familias, y los sectores marginados, inclusive los que muchas veces tenían algunos prontuarios delictivos. Tanto las menciones a los Capitanes Ludd de la revuelta textil y de Swing en la revuelta agraria eran personajes simbólicos que representaban al movimiento espiritual, social y político. Toda acción social tiene una connotación política, más todavía cuando se clama por justicia. El ludismo es considerado por muchos el inicio de las proclamas y de las organizaciones sindicales. Se producen en el mismo seno de la revolución industrial colonialista.
Comparto la siguiente cita:
“La razón de la aprobación general por la destrucción de las máquinas fue, a nuestro entender, el hecho de que el movimiento ludita se manifestó como una especie de «acto de Dios» afortunado, el único capaz -sin tener en cuenta la impensable prohibición de las máquinas por la ley- de liberar a los agricultores de «una situación en la que cayeron involuntariamente. Porque el individuo no puede hacer nada contra el proceso de mecanización. Si retorna a la trilla manual, permite que los demás lleguen antes al mercado de granos. Tampoco fue eficaz el acuerdo voluntario de las partes.”
E.J. Hobsbawm y George Rudé, “Revolución industrial y revuelta agraria El capitán Swimg“, El problema de la máquina trilladora.
Por supuesto, no puedo estar de acuerdo con la expresión de los autores del libro: “Porque el individuo no puede hacer nada contra el proceso de mecanización”, si fuera así, la humanidad no tendría la posibilidad de hacer historia. No hay que invisibilizar la utilización de las armas por parte del poder. El autor considera como impensable una prohibición de las máquinas, debido al contexto de la época. ¿Qué prohibiría hoy una regulación acorde a la realidad social u otra medida que evite la injusticia social?
Como he desarrollado en algunos escritos, el sector dominante tecnocrático pretende imponer tras el Dios Mercado al Dios Robot y a un sector de la humanidad como descartable por obsoleta (incapaz de tener una función en la nueva sociedad) ocultando toda injusticia social, concentración de poder y recursos. Los dogmas del mercado y la tecnocracia ponen un chaleco ideológico a la conciencia del ser humano ofreciendo respuestas pre-armadas que le facilitan respuestas y fundamentaciones al alcance de sus pensamientos más cercanos, como un placebo que elude todo análisis sistémico que se aproxime a los grupos en desventaja.
Hoy más que nunca es necesario un uso responsable de la tecnología, en especial en sus aspectos y consecuencias sociales. La creación de tecnología obviamente no es mala, pero para ello debe ser humanizada, es decir estar en convivencia justa y amorosa con los sectores marginados, pobres y minoritarios. Caso contrario, la ideología dominante es la que la produce, impulsa e impone. OTRO MUNDO ES POSIBLE.
Sectores políticos actuales llaman a la implantación de un ingreso mínimo universal. Si bien puede reducir el impacto, desde la praxis social sabemos que la marginación no solo se resuelve con recursos económicos, sino que requiere de múltiples medidas. Es fundamental la visibilización y no ocultamiento de que el desarrollo tecnológico y su fin en el marco dominante actual buscan la eficientización de las ganancias y reducción de costos por medio de la canibalización del trabajo.
Fuentes:
“Inteligencia Artificial y Robots Humanoides. La crítica. Segunda Parte”, Revista TECNOLOGIA HUMANIZADA número 4 del 2018. https://humanizationoftechnology.com/inteligencia-artificial-y-robots-humanoides-2/revista/2018/volumen-4-2018/11/2018/
“La primera guerra contra las máquinas y sus patrones (1811-1816)”, Revista TECNOLOGIA HUMANIZADA número 1 del 2019. https://humanizationoftechnology.com/la-primer-guerra-contra-las-maquinas-y-sus-patrones-1811-1816/revista/espiritualidad/01/2019/
“La segunda guerra campesina contra las máquinas y los terratenientes”, Revista TECNOLOGIA HUMANIZADA número 3 del 2019. https://humanizationoftechnology.com/la-segunda-guerra-campesina-contra-las-maquinas-y-los-terratenientes/revista/2019/volumen-3-2019/06/2019/
“España, baja del salario, paros y daños a la industria textil ante el uso irresponsable de la tecnología”, Revista TECNOLOGIA HUMANIZADA número 5 del 2021. https://humanizationoftechnology.com/espana-baja-del-salario-paros-y-danos-a-la-industria-textil-ante-el-uso-irresponsable-de-la-tecnologia/revista/espiritualidad/11/2021/
“¿Trabajo digno para las familias de los trabajadores rurales o robots agrícolas para la conveniencia de unos pocos?”, Revista TECNOLOGIA HUMANIZADA número 6 del 2020. https://humanizationoftechnology.com/trabajo-digno-para-las-familias-de-los-trabajadores-rurales-o-robots-agricolas-para-la-conveniencia-de-unos-pocos/revista/2020/volumen-6-2020/01/2021/
E.J. Hobsbawm y George Rudé, “Revolución industrial y revuelta agraria El capitán Swimg“, El problema de la máquina trilladora.
Sé el primero en comentar