¿Automatización de procesos mentales y de procesos físicos? ¿Es así? ¿Son distintas?

Automatización de procesos mente cuerpo

Esta nota no busca ser un tratado filosófico por el amor al saber en sí mismo, sino una reflexión sobre el amor a la humanidad y la justicia.

¿Puede haber una humanidad injusta?

En la humanidad buscamos valores como por ejemplo: afecto, gratitud, amor, comprensión o solidaridad hacia las demás personas, entre otros. Es fundamental la solidaridad, una acción que se realiza entre los seres humanos relacionándose entre sí. Esta interrelación se vuelve digna cuando se desarrolla creando vínculos de ida y vuelta, de diálogo entre ambos actores.

Automatización de la producción. Mente cuerpo

Sabemos que vivimos en un mundo donde se produce riqueza y concentración de recursos en unos pocos. El modelo ordena que esto sea de arriba hacia abajo. Los favorecidos y quienes están a su servicio o quienes pertenecen a sus redes de poder por los motivos que sean, muchas veces también por necesidad de mantener su estatus o privilegios, todos ellos pueden hasta cierto punto elegir una opción laboral, una cuota de dominio, recursos, alimento, dignidad, educación, etc.. Otros sin embargo, no.

Pese a que muchos países, como por ejemplo Argentina, buscaron la educación y la salud universal; también paralelamente en estos se organizó un modelo de corrupción. Me refiero a la morbosa concentración de poder exterior e interior que no permitió garantizar las necesidades básicas de gran parte de la sociedad. Es allí donde se manifiestan los dolores de hambre, los cuerpos quebrados en espíritu, la imposibilidad de sentar bases en la fatalidad de la lucha diaria por la subsistencia y la vida enloquecida por continuos atropellos, no permitiendo establecer la justicia social tan requerida. Es evidentemente necesario consolidar desde la base el refortalecimiento de la mente-cuerpo por medio de su organización comunitaria e integral.

Cabe hacerse la pregunta, ¿desde dónde vemos la humanidad?

La humanidad requiere de conciencia solidaria, de una unión que nos ligue como seres humanos. Haciéndonos sentir el dolor y la necesidad del prójimo como si fuera la propia. Aquí vale la pena hacernos la pregunta: ¿Con quiénes debemos optar por ligarnos para ser solidarios por la vida? La respuesta puede invitar al escape. Al no querer percibir el dolor, y a encerrarnos en pensamientos o ambientes de una pureza tal que no nos contamine con lo corpóreo del dolor de panza (de hambre). Sin embargo, es necesario, como parte de la humanización y transformación personal, no escapar y afrontar ese trago amargo doloroso, ¿Para qué? Para caminar y transitar hacia una sociedad más humana y liberada. Sin duda, la responsabilidad es un valor humano.

¿Con quiénes observamos la humanidad?

La solidaridad responsable, en pos de justicia, nos liga con una opción por los pobres y marginados para que así nuestro espíritu y nuestra razón, perciban inevitablemente las necesidades del otro, en el abrazo, en los sentimientos, en pasos que buscan acompañarse en el camino de la vida. Si nuestra humanidad, unida en la razón y los sentimientos vividos no se entrelaza en un cuerpo-mente con quienes tienen necesidades, no existe posibilidad de justicia y transformación alguna.

Mente y cuerpo son uno, una misma carnalidad. Sufren solidariamente la irracionalidad de una vida acosada por la falta de posibilidades de elección para lograr la subsistencia y prosperidad necesarias para una vida digna. No es posible desvincular lo que le sucede a la mente del cuerpo y viceversa. No son entidades separadas, sino partes integrales de una misma unidad. Se sufre con el estomago, con los pies lastimados, con la piel reseca, con los pulmones con tuberculosis, habiendo más dolencias por mencionar. Las personas «caen» en la calle, como se dice vulgarmente. Pero, no nos podemos quedar con dicha reducción y agregaremos la palabra “nacen” y la acomodaremos con algunas de estas palabras: «escapar, buscar cobijo, salir expulsados a», etc. Todas por causa de diferentes historias, son variadas e injustas, donde la carencia de acceso a una economía y salud integral se ve disociada de una vida sana y digna.

bots Mente cuerpo y la automatización

Cuando se habla de automatización se habla de sustitución de trabajo para la maximización de ganancias de los sectores patronales y acomodados, no importa si la queremos o intentamos dividirla en procesos mentales o físicos, las consecuencias y las acciones son integrales, tienen una manifestación física, mental, directa e ineludible.

Hablan de robots, como humanos, como entes autónomos vivos, para quitar la responsabilidad a sus dueños y de todos aquellos que trabajan para convertir el trabajo en un costo, no en vida plena humana para los que no tienen opción o a quienes sistemáticamente se van reduciendo las mismas. No hay proceso automatizado mental sin sustrato físico y no hay acción que no accione o genere consecuencia sobre lo físico, la vida. La automatización de ambos procesos es lo mismo la separación, la idealización solo busca querer desasociar sus consecuencias y aislarlas de su inhumanidad.

Citaremos un relato del filósofo de la liberación Enrique Dusell para reflexión:

– Si yo creo que el alma es lo bueno, lo divino, lo ingenerado y eterno, el cuerpo es el origen del mal, tener deseos sexuales es pecado, como creyó el pobre San Agustín Osiris, tres siglos antes del fundador del cristianismo y 19 siglos antes de Engels y Marx, le preguntó al muerto: “¿Qué has hecho de bueno en la Tierra?”, y el muerto le respondió: “Le di de comer al hambriento, de beber al sediento, de vestir al desnudo y una barca al peregrino en el Nilo”. Todos eran principios vitales, relacionados con la carne. Para los semitas y para el fundador del cristianismo, dar de comer era la primera obligación, eso es una política, una economía, una concepción del mundo.-

La automatización de procesos mentales, tanto como las automatizaciones físicas, tienen el mismo efecto, el de minimizar los gastos laborales y producir injusticia, disminución de oportunidades, y, por lo tanto, la interrupción de las necesidades básicas de los desfavorecidos y por consiguiente las carencias alimenticias, la marginación y la muerte.

Renovémonos en nosotros, trabajemos por la vida, por quienes no tienen opción, en este mundo injusto en el cual vivimos. Miremos y aproximémonos al pobre, al marginado, a las minorías, para transformar desde ellos y con ellos este mundo.

Acerca de Gustavo Reimondo 131 Artículos
Coordinador de Tecnología Humanizada. Coordinador del proyecto Realidad Empoderada. Un proyecto de realidad virtual para la concientización en una praxis solidaria. Miembro del grupo: "La familia de la calle", organización conformada por personas indigentes y no indigentes en una relación igualitaria. Experto en Robótica, Instrumentación & Control, IoT, Sensórica y sistemas microcontrolados. Experto en el proyecto, especificaciones técnicas y acompañamiento en obras de Infraestructura física de telecomunicaciones para varios continentes. Expresidente de la primera compañía SCM International, Inc. de productos por catálogo de habla hispana de robótica educativa, diseño electrónico, adquisición de datos, sensórica, internet de las cosas etc… Diseñador y programador de herramientas de simulación y adquisición de datos con PC. Desarrollo de múltiples productos electrónicos de baja escala dedicados a la medición, electricidad y sistemas de control de efectos.

1 Comentario

  1. Buenas tardes,
    Como autor de la nota quiero disculparme por no correcta redacción del artículo original. El cual requirió de varias revisiones, y que por error editorial salió publicado sin estas.
    La verdad es que a través de las revisiones, me di cuenta de que estaba trabado (aún todavía lo estoy) con este escrito. Creo que se trató de cierta impotencia o bronca de pensar que nos obliguen a pensar en que lo físico está desvinculado de lo mental o espiritual. Algo que se ve y percibe a simple vista, y que uno lo sufre a través de las dolorosas realidades de lxs amigxs de calle. De solo pensarlo es como que se me cierra la garganta de pensar que el negar unas necesidades se crea que las otras siguen intactas. Algo así como creer que se puede ser feliz en las carencias y que no es ello una enajenación.
    Agradezco a Mary, revisora de la asociación por sus múltiples revisiones y comentarios. Por mi parte había conceptos por destrabar: decir lo obvio de otra manera, de una manera sencilla (pero que lamentablemente me genera mucho dolor que hay gente que lo niegue o quiera que se practique lo contrario)
    Mi agradecimiento a los lectores TECNOLOGIA HUMANIZADA por su paciencia y la Asociación por tener voz en la misma. OTRO MUNDO ES POSIBLE Y NECESARIO.

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